El pasado domingo 27 de octubre desde la asociación ACUNA realizamos una excursión al museo escolar de Pusol y al Parque Natural del Hondo, los dos enclaves situados en las cercanías de la ciudad alicantina de Elche.
En primer lugar, visitamos el museo de la pedanía ilicitana de Pusol, donde está representada la forma de vida, tradiciones, “oficios perdidos” del campo de Elche y alrededores, representando también, en buena parte, la forma de vida pasada en el municipio de Abanilla.
Durante la visita, se nos explicó la forma de funcionamiento del mismo, así como su origen, que data de los años sesenta, cuando en el edificio anexo al actual museo, que entonces no existía, se impartían clases a los niños en una pequeña escuela rural, que aún sigue en funcionamiento, y entonces surgió la idea de llevar diversos objetos procedentes del campo, los cuales no se necesitaran ya en las familias, como utensilios del campo y demás, los cuales estaban empezando a caer en desuso debido a la invención de otros nuevos aparatos que resolvían su utilidad de forma más sencilla. Y con la acumulación de todo este tipo de objetos, se empezó a crear un pequeño museo, con secciones incluso temporales, y se amplió el museo, construyendo nuevos espacios, para poder albergar todo aquello e incluso tiendas enteras que cerraban por cierre de actividad, las cuales se desmontaban enteras para llevarlas allí a fin de que alguien pudiera seguir recordando aquellos tiempos y aquella realidad perdida con el paso de los años.
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En realidad, normalmente son los propios alumnos los que realizan la presentación del museo a los visitantes, y son ellos los que saben qué es lo que tienen que decir en cada caso cuando llegan a un espacio determinado del museo. Actualmente el Museo de Pusol tiene el reconocimiento de la UNESCO, pero no como museo en sí, sino por el valor pedagógico que tiene el hecho de recoger una historia cultural del pasado y fomentar su salvaguarda y el conocimiento de la misma a las nuevas generaciones para que este valor cultural inmaterial se valore y no se pierda.
Posteriormente nos dirigimos al Parque Natural del Hondo, donde los asistentes recibieron una explicación sobre los valores ambientales del humedal en el centro de visitantes y pudieron conocer de primera mano en la ruta que miembros de ACUNA guiaron por el humedal aves como la gallineta, focha, morito, pechiazul, cigüeñuela, garceta, pato cuchara, ánade real, zampullín común, aguilucho lagunero, garza real, porrón común y otras más raras y amenazadas como el calamón o la focha cornuda.
Fue un día muy completo, muy bien organizado.Es interesante conocer esta experiencia del museo por el vlor cultural y antropologico. En cuanto a Hondo es de admirar las balsas naturales y la riqueza de la fauna.Lugar tan cercano y gracias a esta excursión lo he podido conocerGracias a los organizadores. Animo111
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